Para aquellos pseudo artistas parafernalicos y aquellos que creen que solo en la capital hay cosas buenas, aqui esta la prueba irrefutable y elefantiasica de que el arte es mas que una pincelada, es un evento social y humano inserto en medio del corazon de cada uno que hizo posible esto.
Ahora solo falta dejar las huellas que guiaran a los demas a esta pequeña plantita en medio de la salvaje sobriedad de este sol nortino.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario